Anuario del 2022 (esp)

Aquí tenéis resumido lo que ha sido el 2022. A lo largo de estos meses y después de haber revisado alrededor de 42 artículos científicos, la mayoría metaanálisis, espero que podáis estar mejor informados a la hora de tomar decisiones de lo que coméis y potenciar así vuestra salud.

(11/05) Las cerezas son una fruta muy rica en compuestos fenólicos con una excelente capacidad antiinflamatoria (antocianinas, ácidos hidroxibenzoicos, ácido cafeico, ácido cumárico y quercetina). Las antocianinas y la quercetina también tienen capacidad antioxidante. Tanto las antocianidinas como los otros compuestos fenólicos incolores actúan sinérgicamente y, en estudios in vitro, han mostrado actividad anticancerígena y antiproliferativa (impiden la reproducción de células cancerosas); concretamente los ensayos se han realizado con células de adenocarcinoma gástrico y de neuroblastoma.

(24/05) Comer más de 30 vegetales diferentes semanalmente promueve una mayor diversidad de la microbiota intestinal y mejor calidad de especies fermentadoras que producen ácidos grasos de cadena corta. Los ácidos grasos de cadena corta que producimos, participan en nuestro sistema antioxidante, mantienen a raya bacterias como Escherichia Coli o Salmonella, reducen la permeabilidad intestinal e inducen a la apoptosis (muerte programada) de las células cancerosas.

(30/05) El tomillo contiene timol y carvacrol y la EPA (United States Environmental Protection Agency) lo ha incluido como uno de los mejores desinfectantes con evidencia científica para ser utilizado contra el virus SARS-CoV2.

(01/06) Se debe potenciar el consumo de crucíferas (brócoli, coliflor, kale, col, nabo, rábano) ya que son ricas en un compuesto azufrado llamado sulforafano. Este fitonutriente además de estimular/potenciar los procesos de desintoxicación, también nos ayudará a dismunuir los niveles de inflamación, es neuroprotector, tiene acción anticancerígena frente a ciertos cánceres, etc.

(08/06) Existen más de 700 antocianinas en la naturaleza. Estos pigmentos que contienen ciertos vegetales, fluctúan entre el rojo, rosado, azul y púrpura. Nuestra salud puede beneficiarse de la acción de las antocianinas mediante la modificación de la microbiota, disminución del estrés oxidativo, disminución de la inflamación, síntesis del IGF-1 con capacidad neuroprotectora.

(09/06) La fragilidad que experimentamos cuando envejecemos hace que nos volvamos vulnerables a los estresores relacionados con la salud. Sustituir sólo un 5% de proteína animal, proteína proveniente de lácteos, proteína animal de origen no lácteo (carne y huevos) por proteína vegetal reduce el riesgo de sufrir fragilidad un 38, 32 y 42 por ciento respectivamente. Una mayor ingesta de proteína vegetal, pero no de proteína animal, está asociada a una disminución de la fragilidad.

(21/06) La toma de probióticos es capaz de modificar la inflamación persistente y local en pacientes con brotes recurrentes de diverticulitis, pero no debe olvidarse una vez más la importancia de la ingesta de fibra; vital para la viabilidad de la microbiota, para la secreción de sustancias antiinflamatorias y para el movimiento peristáltico diario. Se ha visto que no poder evacuar las heces a diario altera el perfil de la microbiota, promueve el sobrecrecimiento de bacterias patógenas y genera aún más inflamación.

(29/06) Más de 500 millones de adultos en todo el mundo sufren Diabetes Mellitus tipo 2 (DM2). Según estudios recientes llevados a cabo en Canadá-Inglaterra-España, las personas que consumen más ultraprocesados tienen un riesgo entre 37-44-53% de contraer DM2. Un consumo de ultraprocesados aumenta el Índice de Massa Corporal en madres gestantes.

(30/06) Una dieta rica en crucíferas tiene efectos muy beneficiosos para la preservación del ADN gracias a los fitonutrientes presentes con capacidad antigenotóxica (capacidad protectora que evita la mutación del ADN) beneficiándose aún más a aquellos individuos fumadores.

(07/07) Los ‘productos finales de glicación avanzada’ (AGEs) provenientes del patrón occidentalizado de la dieta son unas moléculas tóxicas que podemos ir acumulando con el paso del tiempo, provocan que se disparen los niveles de oxidación e inflamación y hace que de forma irreversible se incremente el ratio de envejecimiento celular. A nivel cerebral, la presencia y acumulación de AGEs comporta la alteración funcional y muerte de las neuronas y provoca una serie de reacciones químicas en forma de cascada que hace que aún se acentúe más el daño oxidativo e inflamatorio y que se inhiba el mecanismo ‘reparador’ cerebral, el BDNF (brain-derived neurotrophic factor).

(13/07) El consumo de fibra dietética disminuye el índice de masa corporal, el perímetro de cintura, promueve la pérdida de peso y sobre todo se reduce de forma significativa los niveles de insulina en ayunas y el índice HOMA-IR (índice que mide la resistencia a la insulina).

(08/08) La generación de nuevo plástico a partir del reciclaje de plástico podría contener retardantes de llama bromados (BFR) y explicaría la presencia de esta sustancia en productos como plásticos por uso culinario o juguetes. Existen muchos artículos que han detectado en diferentes muestras aleatorias en Europa, la presencia de niveles excesivos de BFR en artículos de cocina (utensilios de plástico de color negro) y juguetes. Los compuestos bromados tienen una elevada afinidad por las sustancias grasas y el hecho de cocinar con aceite u otros tipos de grasa hace que la transferencia de este tóxico a la comida sea muy considerable y por tanto que nos podamos contaminar y acumular muy fácilmente.

(10/08) Los cepillos de cocina son mucho más higiénicos que las esponjas; microorganismos como el Campylobacter o Salmonella (ambos patógenos) podían persistir en las esponjas hasta una semana; hay un aumento de la proporción de bacterias gram-negativas (la mayoría patógenas) y Pseudomonas (patógeno) con el paso del tiempo en esponjas. Se recomienda potenciar el uso de los cepillos, sustituir estropajos y cepillos que hayan podido estar en contacto con salpicaduras de jugos provenientes de carne o aves, desinfectar periódicamente tanto esponjas como cepillos con jabón de lavar platos, cloro o hirviéndolos (si es posible ….).

(22/08) Las enfermedades de origen no infeccioso son la principal causa de discapacidad y muerte en todo el mundo. Globalmente, los distintos sistemas sanitarios están centrando sus esfuerzos en combatir la aparición o desarrollo de enfermedades crónicas. Estas enfermedades crónicas tienen un común denominador: la ingesta excesiva o desequilibrada de ciertos alimentos y/o nutrientes = los alimentos ultraprocesados. Las regiones y porcentaje donde más creció el consumo ultraprocesados en el periodo 1991-2008 fueron: 11% Galicia+Asturias y Cantabria, País Vasco y Navarra; 10,1% Cataluña+Aragón; 9,41% Castilla León; 8,38% Cominidad Valenciana; 6,7% Canarias; 6,13% Andalucía y 5,2% Comunidad de Madrid+Castilla La Mancha.

(13/09) Una mayor ingesta de selenio disminuye la prevalencia (número de personas que padecen una enfermedad) de enfermedades cardiovasculares.

(20/09) El consumo de bebidas azucaradas o bebidas ricas en fructosa (jarabe de maíz alto en fructosa) durante la adolescencia hace disparar la aparición de adenomas intestinales (AI) antes de los 50 años. Mujeres que han comido muy poca fruta durante la adolescencia tienen aumentado el riesgo de aparición de AI en comparación con mujeres que en la misma edad han tenido en consumo elevado de fruta. Los alimentos que promueven el enriquecimiento-mantenimiento de microbiota metabolizadora de azufre hacen disparar el riesgo de la aparición de AI (carne procesada), ya que se produce un exceso de producción de sulfuro de hidrógeno (sustancia procancerígena). Aunque el consumo de carne roja y carne procesada es un factor de riesgo claro de Cáncer Colorrectal (CCR) en personas mayores de 50 años, los resultados no dejan del todo claro que el consumo de carne roja haga aumentar el riesgo de CCR en menores de 50 años.

(05/10) Los vegetales poseen una serie de sustancias (vitaminas, minerales, fibra y otros) que mejoran ostensiblemente nuestra función inmunológica. No hay que olvidar que tanto las vitaminas, minerales y otras sustancias vegetales tienen sinergias entre ellas y que, por tanto, el fruto de esta potenciación también podrá beneficiarse del sistema inmune. Participan directa o indirectamente en la síntesis y mantenimiento de células del sistema inmune, mejoran la función de células inmunes como los neutrófilos, nos protegen de la oxidación porque tienen actividad antioxidante o estimulan la formación anticuerpos.

(06/10) Cuando la microbiota instetinal fermenta la fibra genera un cambio de pH que favorece la transformación química del hierro de la dieta (la forma del Hierro 3+ pasa a Hierro 2+ = mejora biodisponibilidad) y paralelamente se generan todo una serie de sustancias llamadas ácidos grasos de cadena corta que, entre otros aspectos beneficiosos para la salud, facilitan muchísimo la absorción del hierro, potencian el paso del hierro desde el lumen intestinal hasta el torrente sanguíneo.

(11/10) La evidencia científica actual sugiere que globalmente el déficit subclínico de magnesio está muy extendido y puede ser causante de muchas enfermedades crónicas, entre ellas las enfermedades cardiovasculares y la muerte prematura. Un déficit de magnesio puede causar hipertensión, aumenta la predisposición de sufrir aterosclerosis, calcificaciones de la arteria aorta, degeneración de las fibras musculares del miocardio e inflamación del tejido conectivo en cualquier parte del cuerpo.

(17/10) La deficiencia de yodo puede causar hipotiroidismo, que perjudica la normal neurogénesis y reduce el número de nuevos neuroblastos y neuronas inmaduras lo que puede comportar trastornos del estado de ánimo como la depresión.

(25/10) Estudios científicos han mostrado con creces una importante mejora a corto plazo en cuanto a la suplementación con omega-3 y la sequedad ocular. Las antocianinas son uno de los flavonoides más estudiados, puesto que presentan propiedades notables antioxidantes, antiinflamatorias e inmunomoduladoras, mejorando la microcirculación de las estructuras oculares, la función acomodativa del ojo y la producción de lágrimas. Los carotenoides, los pigmentos provenientes de las plantas, actúan como filtro y nos protegen contra la luz azul, especialmente la luteína, la zeaxantina y también la astaxantina.

(31/10) Una dieta alta en grasas (especialmente grasas saturadas, grasas trans y colesterol) y una dieta alta en azúcares refinados (azúcara, fructosa y dextrosa) producen un declive cognitivo a cualquier edad. El consumo de una dieta alta en grasa tiene efectos negativos en el desarrollo y la maduración del sistema nervioso central en los más jóvenes y en las personas mayores se acentúa aún más el decaimiento cognitivo asociado a la edad. Las grasas omega-3 bloquean el daño que sufren las conexiones nerviosas a medida que envejecemos o se inicia la neurodegeneración, ralentizando el declive cognitivo.

(04/11) El consumo de arroz blanco está asociado al aumento del riesgo de sufrir Diabetes Mellitus tipo 2 (DMT2), disparándose el riesgo más en mujeres que en hombres. Se ha encontrado una asociación inversa al comer arroz integral y el riesgo de sufrir DMT2. Además, sustituir arroz blanco por arroz integral se traduce en una mejora del colesterol HDL (colesterol bueno).

(10/11) Hay ciertos aditivos alimentarios, e incluso el jabón de lavar los platos, que generan cambios perjudiciales en la composición de la microbiota intestinal generándose una muy similar a aquellas personas que padecen obesidad o enfermedad inflamatoria intestinal y que podrían explicar el aumento de enfermedades no transmisibles. Se recomienda ser cauteloso con la ingesta de alimentos que contengan cinamaldehído, polisorbato-80 (E-433), sulfito de sodio (E-221), benzoato de sodio (E-211), sucralosa (E-955) y detergente de lavar platos.

(16/11) La práctica de yoga adaptado al período perinatal es seguro y es un tratamiento no farmacológico efectivo en la reducción de la depresión y ansiedad en este período vital.

(22/11) La suplementación con hierro hace disparar el riesgo de sufrir Parkinsonismo y un exceso de la ingesta de hierro acelera la Enfermedad de Parkinson.

(28/11) Se cree que el contenido de hierro heme de la carne oxida el ADN de nuestras células y además participa en la formación dentro de nuestro cuerpo de compuestos cancerígenos N-nitrosos. Además, el hierro heme es vital para que la bacteria Helicobacter Pylori pueda crecer; recordemos que esta bacteria es la causa principal de cáncer de estómago. Los autores también recalcan que independientemente del contenido de hierro, en la carne (roja, blanca y procesada) puede haber un exceso de sal y está cargada de grasas saturadas, colesterol, hidrocarburos aromáticos policíclicos y aminas heterocíclicas (ambos son grupos de compuestos cancerígenos = mutágenos, que se forman en la preparación, cocción de la carne y procesados de carne) que pueden desempeñar un papel determinante en la aparición de cáncer de estómago.

(02/22) Las personas que padecen Diabetes Mellitus tipo 2 (DM2) y/o sobrepeso y siguen una dieta vegana (en comparación con aquellas personas con DM2 y/o sobrepeso que no la siguen) reducen el peso corporal, el índice de masa corporal, la hemoglobina glicosilada, el colesterol total, y el colesterol LDL (malo).

(09/22) La ingesta de grasa de origen animal hace disparar el riesgo de padecer cáncer de vejiga urinaria. Consumir ciertos tipos de carne y la temperatura de cocción escogida, empeoran la gravedad de padecer cáncer de vejiga urinaria.

(16/22) La obesidad infantil en el Estado Español ha aumentado de forma considerable en el período 2011-2021; sobre todo en la franja de edad entre 2-6 años. La obesidad infantil se asocia a una mayor probabilidad de obesidad a edad adulta, muerte prematura y discapacidad a edad adulta. Además, los niños obesos sufren mayores dificultades respiratorias, tienen un mayor riesgo de fracturas e hipertensión, alteración de los marcadores cardiovasculares ya en la infancia, aumento de la resistencia a la insulina y alteraciones psicológicas.

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